La pretensión de que el testimonio de que nadie tiene derecho de ser adorado fuera de Allah elimina incluso cualquier acto de politeísmo cometido desp


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Pregunta: Mi padre me suele decir que sólo con ofrecer la oración prescrita, ayunar y memorizar solamente el sura de Al-Ijlas (La fe pura): Di: Él es Allah, Uno ( Número del tomo 1; Página 338)  y el de Al-Nas (los Humanos), los cuales recita en cada oración, el hecho de cometer cualquier acto de politeísmo o incredulidad no afectará, siempre y cuando él testifica que no hay otro dios fuera de Allah y que Muhammad es Su Mensajero. ¿Cuál es la opinión de su Eminencia a este respecto? ¿Es esto cierto?, ya que podría cometer uno de los actos que invalidan el Islam o un acto de incredulidad, tal como recurrir a otras leyes que contradicen la shari'ah (Legislación Islámica) o asociar a otros con Allah?


Respuesta: Fue narrado auténticamente que el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo: “Se me ha ordenado combatir a la gente hasta que digan: "La ilaha illa Allah" (Atestiguamos que no hay más dios que Allah). Si lo dicen, estarán a salvo de mí en cuanto a su sangre y su riqueza, a menos que sea en talión, pues es ante Allah tienen que rendir cuentas. Recurrir a otras leyes fuera de las de Allah, creyendo que son mejores o equivalentes a las de Él, es un acto de incredulidad y es un acto que invalida las dos profesiones de la fe. Del mismo modo, considerar a cualquier otro ser como rival de Allah o Su socio; llamándole y implorándole para evitar calamidades o traer beneficios, todo esto es una incredulidad que le saca a uno fuera del Islam. La mera pronunciación de las dos profesiones de fe serán de ningún provecho para quien persista en la comisión de los actos y hechos de incredulidad y politeísmo, porque afirmar el testimonio de fe implica renegar todo aquel que se adora junto con Allah. Sin embargo, lo clarifica otro hadiz del Profeta en el que dice: Quien dice: "La ilaha illa Allah" (No hay más dios que Allah) y niega a todo lo que se adora fuera de Allah, pondrá a salvo su vida y su riqueza y sólo Allah le pedirá cuentas. Así que, su deber consiste en aclarar la verdad a su padre, ya que quizá Allah lo guíe. ( Número del tomo 1; Página 339) ¡Que Allah nos conceda el éxito!¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!




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